La empresa segoviana Sanchonar S.L., ubicada en la localidad de Sanchonuño, aspira a introducir sus productos, principalmente pollo ecológico “de primera calidad” y productos de 4ª y 5ª gama, como salchichas, hamburguesas, pinchos morunos o canelones de pollo, en algún país de Centroeuropa, como Austria, Alemania o Suiza, un proyecto en el que trabaja ya de la mano de la Asociación Artesanos Alimentarios de Castilla y León y del sello de calidad Tierra de Sabor y en el que la firma segoviana tiene puestas muchas expectativas.
Así lo ha explicado a Europa Press el representante de Sanchonar, Santiago Rodrigo Arevalillo, para quien conseguir mandar a Centroeuropa este mismo año un sólo paquete con alguno de sus productos, “aunque sólo sea de tres kilos”, supondría cumplir “una ilusión personal”, consciente de la importancia de superar la dificultad inicial de abrir nuevos nichos de mercado en el exterior y del “tremendo trabajo” que lleva consigo.
“De uno a 200 kilos sería facilísimo”, ha considerado Santiago Rodrigo, que ha aprovechado la ocasión para destacar el “trabajo extraordinario” que están realizando desde Artesanos Alimentarios de Castilla y León y desde el sello de calidad Tierra de Sabor para enseñar a pequeñas empresas, como Sanchonar S.L., a vender y a comercializar sus productos y a abrir posibilidades de exportación con la búsqueda de distribuidores o de logística.
“Me consta que están trabajando muy bien, nos están ayudando mucho y creo que voy a poder conseguirlo”, ha aseverado el representante de Sanchonar, que ha apelado al potencial de los productos ecológicos de 4ª y 5ª gama en países como Austria, Alemania o Suiza, donde este mercado está más desarrollado porque “van por delante de los tiempos que corren en el consumo de alimentos ecológicos”, a diferencia de España donde “no se conocen”.
Otro de los objetivos de Sanchonar S.L. pasa por poner en el mercado sus ‘Eco-delicatessen’, para lo que utilizarán las aves que producen para prepararlas posteriormente con “sabrosas” recetas listas para “calentar y comer”.
Además, de cara a la próxima Navidad la empresa segoviana lanzará al mercado nuevos productos, entre los que destaca la ‘pularda ecológica cruda’, la ‘pularda ecológica rellena’, el ‘roti de pollo ecológico’, el ‘lechazo ecológico asado al estilo de Segovia’ y otros rellenos asados.
Sanchonar tiene su origen en un negocio de avicultura selecta que dio sus primeros pasos hace 12 años a título personal aunque la empresa, de carácter familiar, se constituyó formalmente hace tres años de la mano de Elena Herrero Pascual con la instalación de todo el sistema productivo, desde dos naves con capacidad para producir 2.800 pollos entre ecológicos y convencionales a un matadero artesano homologado, sala de despiece y cocina para la elaboración de los productos precocinados de avicultura selecta.
Precisamente, otro de los objetivos de la empresa a corto-medio plazo (entre dos y tres años) es convertir toda la producción de pollo en ecológico, unos animales que pasan a la nave con entre 1 y 3 días de vida para ser engordados con pienso de origen ecológico, sin abonos minerales, herbicidas u otros pesticidas. A los 40 días de vida estos pollos salen al patio, donde disponen de un espacio de 4 metros cuadrados por ave cuando en un sistema intensivo lo normal es que se destine un metro cuadrado para entre 16 y 17 cabezas.
Además, y aunque la normativa europea de producción ecológica marca una edad mínima para el sacrificio de los pollos de 81 días de vida –43 para el pollo convencional–, la empresa segoviana se ha comprometido a incrementar este tiempo hasta los 110 días, unos cuatro meses, lo que redunda en una “calidad superior” para una carne con “más sabor y textura” y “mayor estructura”. “Sabe a pollo”, ha significado Rodrigo.
La empresa segoviana comercializa sus productos bajo dos marcas, Sanchonar y Ecosancho, tanto en crudo (pollo entero, troceado, trasero, trasero sin espinazo o trasero deshuesado, además de pechugas, alistas o mollejas) como elaborados refrigerados (trasero y alas asadas en su jugo, caldo de gallina y pollo, paté de hígado de pollo o gallina en pepitoria) o elaborados congelados (croquetas, salchichas y hamburguesas de pollo).
Santiago Rodrigo ha explicado, además, que todo los productos de Sancholar y Ecosancho se elaboran con muslos y contramuslos picados, la parte más noble del pollo lo que garantiza la “calidad” del producto, a diferencia de otros elaborados de carne de ternera o cerdo para los que se utilizan piezas menores.
Con una capacidad para sacrificar unos 125 pollos semanales, esta empresa familiar da trabajo a cuatro empleados “multifunción” que realizan todas las labores, desde matadero, como granja o elaboración de productos. “Lo que toca”, ha precisado Rodrigo, que ha reiterado las “aspiraciones de futuro” de esta firma en su apuesta por los productos ecológicos de 4ª y 5ª gama y cuya evolución al alza “se nota mes a mes” ya que el consumidor cada vez se decanta más por los alimentos más sanos.
El principal mercado de los productos Sanchonar y Ecosancho está en Madrid, por su cercanía al centro de producción (Sanchonuño y Arroyo de Cuéllar) y su potencial en clientes, además de Segovia y otras provincias de Castilla y León como Valladolid, Palencia, Zamora y Burgos, a las que se han sumado también Barcelona y Málaga. La empresa sirve sus productos en “pollerías de alta gama”, como las ubicadas en los mercados de Chamartín y Maravillas, en la capital de España, o en supermercados como los Sánchez Romero.
“Tendríamos que ampliar para abastecer a más territorio”, ha reconocido el representante de Sanchonar, para quien se trata de un objetivo difícil, de momento, ante las restricciones de acceso a la financiación que sufren las pequeñas empresas. “Tenemos capacidad para hacer más pero también hay que ser realistas y es mejor ir pagando lo que hemos hecho hasta ahora”, ha sentenciado.